¿Necesitas aprender a opositar? Haces bien buscando esta información. Realmente, nadie nace sabiendo hacerlo, y sí, es algo que se puede aprender a hacer bien, y puede requerir bastante tiempo. Siii nooo fueeeraaaa porque hemos creado este artículo para ti 😎.
Vamos a resolver todas tus dudas, basándonos en nuestras conversaciones con todos los opositores novatos que ayudamos cada día, así que estás más que cubierto.
¿Es difícil aprender a opositar?
¡Pues claro que sí! Puedes tardar meses (o incluso años) en entender cómo funciona este mundo. Al fin y al cabo, no es fácil estudiarse un tochaco de temario, preparar pruebas bastante complicadas o entender las bases de la convocatoria. Tiene mucho sentido que te sientas perdido. Todos hemos estado ahí, no es coña. Y es increíble cuando por fin “captas” de qué va todo este rollo.
Obviamente, aprender a opositar es posible. Con la orientación adecuada y un buen plan, cualquier opositor puede avanzar, y más rápido de lo que imaginas. Es cuestión de compromiso, estrategia y, sobre todo, tener a alguien que te enseñe el camino a seguir.
Ya te hablaremos sobre esto más adelante. Por ahora, sigue leyendo y empieza con buen pie.
¿Cuánto tardas en sacarte las oposiciones?
Depende de varios factores, como el tipo de oposición, tu situación personal o el tiempo que puedas invertir.
Por ejemplo, la opo de Auxiliar Administrativo se puede aprobar en menos de un año (conocemos casos). Pero, seamos realistas, muchos opositores tardan hasta tres años en conseguir su plaza.
Si trabajas, tienes hijos o más responsabilidades, es probable que tardes más en cualquier caso, y eso es normal.
Aquí no hay atajos, pero sí estrategias que acortan el camino. Planificarte bien el día, la semana, el mes y hasta el año será uno de los pilares para conseguirlo.
¿Qué debes tener en cuenta antes de opositar?
Si estás pensando en opositar, ten en cuenta esto:
AHORA es un momento único para opositar: En los próximos 10 años, se jubilarán un millón de empleados públicos, lo que significa que habrá más plazas que nunca. Si no consigues una plaza en la primera convocatoria, habrá muchas más.
Evalúa tus opciones: No todas las oposiciones son iguales. Analiza los temarios, las pruebas y los requisitos antes de decidirte. Piensa si realmente te ves trabajando en ese puesto durante años.
Constancia y planificación: Aquí no gana el más rápido, sino el más constante. Algo que siempre decimos en Formación Ninja: opositar no es un sprint, es una maratón. Tenlo en cuenta.
Tu motivación es clave: ¿Por qué opositas? ¿Estabilidad, vocación, mejores condiciones laborales? Tener clara tu motivación te ayudará a mantener el foco cuando las cosas se pongan difíciles. Empieza ya a pensar en eso. Te lo desarrollamos un poco más adelante.
El papel de la academia: Una academia puede ayudarte a organizarte mejor y a evitar errores típicos de novato. Como estás compitiendo, no puedes permitir que otra gente te coja ventaja así como así. Busca una academia que realmente entienda tus necesidades y se involucre en tu éxito.
¿Cómo aprendo a opositar?
No vas a saber cómo opositar solo por sentarte delante de un montón de apuntes. Piensa que este es un proceso que tiene que cambiar tu manera de pensar, organizarte y vivir. Es que es un estilo de vida muy concreto, no te vamos a engañar.
Aquí tienes un vídeo muy completo con lo que ojalá nos hubieran dicho a muchos antes de empezar:
Para más, aquí tienes los pasos que vas a tener que dar sí o sí:
1. Define tu propósito
No opositas porque sí. Encuentra tu "por qué". ¿Estabilidad laboral? ¿Más tiempo libre? ¿Un trabajo que te apasione? Tener claro tu objetivo es lo que te va a levantar cada día con ganas de estudiar, incluso cuando no te apetezca.
Piensa que opositar será duro. Nadie oposita y resiste tanto tiempo currándoselo sin un porqué firme detrás.
2. Conoce bien la oposición que vas a preparar
Antes de lanzarte a por una oposición, investiga, busca por internet, hazte preguntas:
¿Cuándo es la próxima convocatoria?
¿Me dará tiempo a preparármela?
¿Cuánto se suele tardar?
¿Cómo son los exámenes?
¿Qué temario necesitas?
¿Qué requisitos piden?
Lee las bases de la convocatoria como si fueran un guion, y síguelos a rajatabla, porque definirán tal cual lo que deberás de hacer. Tener toda esta información, y ser capaz de entenderla, te dará ventaja sobre la mayoría de opositores.
Esto lo hemos dicho miles de veces. Aquí te damos más detalles:
¿Que de momento no han salido las bases de tu convocatoria?, ¡busca las de la convocatoria anterior! Si no sale nada buscando "oposiciones de Auxiliar Administrativo de Málaga 2025", busca las de 2024, 2023… Acabarás pillando información por algún lado.
Por cierto, en nuestro blog te hacemos la vida un poco más fácil haciendo precisamente este trabajo por ti y trayéndote las últimas novedades (y todo lo vamos actualizando cuando toca). Aunque, si fueras alumno de nuestra academia, también te avisaríamos internamente de cualquier convocatoria relacionada con tu opo, como hacemos siempre con todos los alumnos.
3. Planifica, pero hazlo bien
No cometas el mismo fallo que todo el mundo comete al empezar, por los falsos mitos de opositar: intentar estar más de 12 horas al día hincando los codos. Esto ya lo hace mucha gente, y NO FUNCIONA. Por no hablar ya de lo traumatizante que puede llegar a ser usar un sistema tan aburrido y anticuado, y más durante mucho tiempo.
De esas 12 horas, puedes estar seguro que estudiarías muy pocas realmente. No tienes que buscar estudiar más horas, sino mejor.
Mira, para empezar, estudiar muchísimas horas es como intentar talar un árbol a cabezazos. Lo acabarás consiguiendo con mucho dolor (y dolores de cabeza), pero tardarás una eternidad.
Para talar un árbol necesitas una hacha, y no vale cualquier hacha: necesitas un hacha que esté afilada. Para afilar el hacha vas a necesitar dedicar un tiempo cada día.
Por tanto, para opositar, hay que hacer varias cosas, y lo principal es usar los métodos correctos y acordarte de afilar el hacha, es decir: descansar, planificar y sobre todo tener autocrítica y buscar maneras de mejorar tus procesos.
Por eso, deberías de empezar por limitar tu tiempo de estudio para pillar el ritmo adecuado desde el principio sin agobiarte, y organizarte para ser eficiente.
Algunas cosas que puedes hacer (aplícalo según tu caso):
Divide el temario en bloques manejables.
Crea un calendario realista que se adapte a tu vida (y sí, esto incluye días libres para descansar, date al menos 1 o 2 días libres a la semana).
Usa métodos de estudio como el "sistema de vueltas" para repasar todo el temario varias veces antes del examen.
Aplica técnicas de estudio, que no son lo mismo y pueden transformar tu manera de estudiar, y hacértelo pasar mucho mejor.
Si no tienes ni idea de cómo empezar, no te preocupes, aquí entra en juego una buena academia (luego te contamos más sobre esto).
4. Desarrolla hábitos de estudio sólidos
Por mucha organización que tengas, no vas a convertirte en un opositor de élite de la noche a la mañana, tenlo claro. Sin embargo, lo que sí ayudará mucho es la constancia, que apliques tus planes a rajatabla y vayas viendo cómo avanzas, cómo te afecta tu nuevo calendario y en qué puedes mejorar.
Sobre todo, a la hora de organizarse, intenta primero conseguir el hábito. Es mucho más importante ser constante que intenso.
Por eso, empieza con sesiones cortas y aumenta el tiempo poco a poco
Así se lo contábamos a una opositora a la que todas las horas se le iban en productividad:
La constancia es tu mejor amiga. Recuerda: mejor 2 horas todos los días que atracones de 12 horas una vez al mes.
Además, aquí te explicaremos cuáles son los mejores hábitos del opositor:
5. Rodéate de buena gente
Opositar es un camino largo y, muchas veces, solitario. Pero no tienes por qué sufrirlo tanto.
Una de las mejores decisiones que puedes tomar es rodearte de personas que te entiendan y apoyen. Esto te hará más feliz y, por supuesto, te hará rendir más.
Si no tienes esto, no te preocupes, que hay maneras de conseguirlo.
Empieza por hablar con otros opositores que estén en tu misma situación. Comparte experiencias, dudas y logros con los demás. Verás que conectaréis enseguida, porque estáis pasando por lo mismo, y así es imposible no empatizar.
Tus amigos y familiares también juegan un papel importante aquí. Explícales tu situación para que entiendan por lo que estás pasando y lo importante que es para ti superar este reto.
Seguramente, las personas que no opositan no son capaces de llegar a entender del todo el nivel de sacrificio que implica, pero lo probable es que te sirvan de apoyo igualmente.
Y puede que te venga bien este período, porque mucha gente dice que durante una oposición se descubre quién es amigo de verdad y quién no.
La verdad es que no todo el mundo querrá apoyarte. Si detectas comentarios pesimistas o personas que minimizan tu esfuerzo, es mejor mantener cierta distancia.
La verdad es que suficiente vas a tener ya con tus propios problemas, así que no vas a tener energía para lidiar con ese tipo de comentarios.
Recuerda que opositar no significa aislarse. Tener una red de apoyo es clave para estar más motivado y superar cualquier reto.
6. Gestiona el estrés como un pro
Entre los temarios, los plazos y la incertidumbre… ¿quién no iba a estar estresado?
La verdad es que el estrés es un compañero de viaje inevitable cuando opositas. Pero aquí está la clave: tienes que aprender a gestionarlo de forma inteligente.
En lugar de intentar abarcarlo todo de una vez, ponte metas pequeñas y concretas. Por ejemplo: “Hoy estudiaré el tema 1 y haré 10 preguntas de test”. Eso, podría ser, ¿no? Que sea abarcable te ayudará a tomártelo de otra manera. Ponte objetivos alcanzables, punto. Así, en realidad, puede que acabes superándote más de lo que crees...
Por cierto, el deporte podría venirte bien. Dedica tiempo a algo que disfrutes: salir a pasear o correr, practicar yoga, bailar...
También, habrá días en los que no cumplas tu planificación o en los que sientas que nada avanza. Y eso está bien. No dejes que un mal día defina tu progreso. Aprende a soltar esa presión, reevalúa tu plan y sigue adelante. La clave está en no rendirse.
Opositar no significa estar con la cabeza metida en los libros todo el día (recuerda lo de los cabezazos). Si ves que nunca sabes cuándo descansar, prográmatelo a lo largo del día y dedica tiempo a actividades que te llenen de energía. ESTO te hará más feliz (y productivo).
Por último, tu lugar de estudio también es importante, porque influirá en tu nivel de estrés. Crea un espacio limpio, bien iluminado y sin ruido, si puedes. Dependiendo de la persona, le puede ir de fábula ponerse este vídeo con música que hemos preparado:
7. Confía en ti mismo
Nadie puede aprobar por ti. Por eso, tienes que creerte que puedes conseguirlo. La autoconfianza es clave, porque te sostendrá en los momentos más duros, y conseguirá que resistas cada golpe.
Es fácil pensar que los que consiguen su plaza son genios, personas con una "memoria prodigiosa" o que tienen algo que tú no.
Por supuesto, NO. Ni-de-lejos.
Los opositores que aprueban son solo personas normales, con días buenos y malos, pero que han aprendido a gestionar su tiempo, sus emociones y su confianza.
De hecho, muchas personas que tienen récords en capacidad de memoria utilizan... técnicas de estudio para memorizar, como el palacio de la memoria (para sorpresa de ninguno de los que estamos en Ninja y sabemos de lo que somos capaces de conseguir).
Todos tenemos momentos en los que nos cuesta avanzar. En esos días, evita caer en pensamientos negativos como "no valgo para esto" o "nunca lo conseguiré". En lugar de eso, repítete frases como estas:
"Estoy avanzando poco a poco."
"Cada día estoy más cerca de mi objetivo."
"Si otros lo han conseguido, yo también puedo."
Y ojo, que un tropiezo no es el fin del mundo. Quizás suspendas un simulacro, o sientas que no has aprovechado bien una semana. Esto es normal, y lo que realmente importa es que analices lo que no ha funcionado, corrijas lo que debas y sigas adelante con más fuerza.
Seguro que tienes todo lo necesario para llegar a la meta. ¡Ya te lo estás demostrando a ti mismo por haber empezado a buscar este tipo de información por internet!
8. Elige bien tu academia
Cuando se trata de opositar, no deberías de hacerlo solo. Tu academia puede ser la clave del éxito… o un obstáculo más. Elegir la mejor academia de oposiciones es indispensable, ya que no todas ofrecen lo mismo ni tienen el enfoque que necesitas.
¿Qué debe ofrecerte una buena academia?
Bueno, esto lo veíamos en el artículo que te acabamos de enlazar, pero básicamente:
Debe de darte lo que necesitas. Tiene que centrarse en lo que TÚ quieres, no en lo que a ellos les conviene. Una buena academia TE EMPODERA, te da todo lo necesario para que seas más capaz, nunca al revés (te quedarías de piedra con lo que hemos visto por ahí en nuestra época de opositores).
Te facilita acceso a TODO: Nada de irte desbloqueando todo poco a poco, mes a mes. En una buena academia, ese tipo de prácticas abusivas no se aplican. Aquí, que cada uno se organice como quiera. Estudia tanto como necesites.
Pon todo en práctica: Si la academia cuenta con una parte práctica, mucho mejor. Ahí son claves los test que simulan un examen real. Precisamente, una plataforma de test, con muchas opciones y personalizada, sería lo ideal, ¿no crees?
Te enseña técnicas de estudio. No todo en la opo es estudiar, hay que saber cuándo pararse un momento y aplicar otro método. Hoy en día, para estar a la altura de la competición que hay ahí fuera, tienes que saber técnicas de estudio. Son estrategias para memorizar mejor y más rápido.
Mucho ojo con las academias que no tienen todo esto, porque hoy en día el tipo de ofertas que hay están MUY desfasadas. No es broma.
En Formación Ninja, precisamente cumplimos con todo esto y cada día mejoramos más y más.
Nos hemos vuelto imbatibles como academia de oposiciones online, y precisamente por eso cada vez más opositores se vienen con nosotros.
De hecho, por necesidad, hemos acabado sacando una formación con asesoramiento personalizado muy especial que ofrecemos a grupos reducidos, llamada Plan Élite. Ideal para ambiciosos, comprometidos y dispuestos a dar el 100 %.
Ahí no solo aprenderás a opositar en sí, también sabrás cómo organizarte y por dónde empezar a encarar el gran reto que tienes por delante. Si te interesa, vente a nuestra academia o contáctanos si tienes cualquier duda sobre lo que podemos ofrecerte. ¡Mucho ánimo y conviértete en el mejor opositor posible!